Una hermosa luciérnaga de cuya luz y paz  me sentí atraída al instante, me fascinaron sus colgantes con la madera del árbol mágico con el que resuena tu ser, el mío, la higuera, el árbol del Edén. Me explico su creación con todo detalle y mimo, sentí que cada pieza que pasa por sus manos son obras hechas llenas de amor, y así lo siento hasta el día de hoy que lo llevo conmigo a todas partes, un cachito de mi tierra por el mundo. Eternamente agradecida de encontrar magas tan bonitas que aman su arte.